La calefacción por muros radiantes calienta directamente a las personas, no el aire. Calor de hogar le ofrece una temperatura uniforme y confortable con una operación silenciosa, segura y económica.

CONFORT

El calor que irradia el muro calienta primero a las personas y los objetos, para después difundirse suavemente a toda la habitación, sin corrientes de aire ni áreas frías.

FLEXIBILIDAD

El muro radiante es confortable, invisible y no interfiere con el amueblado o la decoración. El muro radiante hidrónico puede combinarse con cualquier otro elemento de calefacción radiante como zoclos o radiadores para ajustarse a las necesidades de cada habitación, mientras que el eléctrico al no requerir una caldera es una opción práctica y económica para aplicarse en áreas reducidas.

Los termostatos de área permiten controlar la temperatura en cada habitación, con horarios programados según las necesidades de cada momento del día, regulándola o apagándola cuando no se requiera.